„Nos atrevemos a compartir más datos“

En diálogo con Dr-Ing. Olaf Sauer

Para aprovechar plenamente el potencial digital de las empresas, es preciso intensificar considerablemente la transferencia y el intercambio de datos, afirma el Dr. Ing. Olaf Sauer, del Instituto Fraunhofer de Karlsruhe. Por eso cree que una mayor apertura, comunicación y transparencia son aspectos cruciales.

¿Cómo se puede impulsar eficazmente la digitalización en las empresas y utilizarla de forma rentable?

En mi opinión, el intercambio multilateral de datos será aún más importante en el futuro, es decir, la transferencia y puesta en común de datos que ya están disponibles entre los agentes actuales de una industria o cadena de procesos concreta. Estos datos deben estar disponibles y aprovecharlos. Para un operario de una prensa metalúrgica, por ejemplo, tendrían importancia los datos de la bobina procedentes del fabricante del material, ya que le permitirían manejar mejor sus sistemas. Por supuesto, el ajuste clásico de cada uno de los pasos del proceso está justificado, pero en mi opinión, el intercambio de datos de alto nivel en los llamados ecosistemas de datos alberga un potencial mucho mayor de mejoras y aumento de la eficiencia. Hoy en día, este potencial puede aprovecharse sin problemas técnicos. En este contexto, la cultura de una empresa en la que el intercambio interdisciplinar de datos sencillamente no forma parte de la filosofía empresarial suele tener un efecto limitador. En este sentido, el avance de la digitalización requiere en general una mayor apertura, comunicación y transparencia, así como la expansión de los correspondientes ecosistemas de datos.

¿Qué beneficios obtienen sus clientes de los proyectos de digitalización y cómo funcionan?

Los proyectos de digitalización pueden utilizarse para cuantificar y aprovechar el potencial de ahorro real, como es el caso de un cliente actual que fabrica paneles de madera. Gracias a las herramientas digitales, fue capaz de optimizar el uso de los materiales, aumentar la disponibilidad de las máquinas e integrar el control de calidad directamente en línea. Se trata de mejoras considerables que ahorran costes. Por principio, en primer lugar elaboramos una hoja de ruta con nuestros clientes y aclaramos en qué áreas de negocio sería útil la digitalización y con qué objetivos. A continuación, se define una hoja de ruta quinquenal de medidas. Es fundamental depurar los propios procesos conforme al principio de la metodología Lean antes de empezar con la digitalización. Al fin y al cabo, la digitalización no podrá mejorar un proceso mal organizado. La digitalización comienza entonces con el uso de sistemas básicos que utilizan datos de producción, por ejemplo, y hacen que la producción sea transparente: ¿Cuál es el estado de la máquina? ¿Qué pedidos se han realizado ya y en qué medida? ¿Qué hace que la pieza sea de calidad? A continuación, se analizan los datos, por ejemplo, en lo que a las desviaciones del comportamiento normal se refiere. Procesos como el aprendizaje automático, la IA y el mantenimiento predictivo se basan en esto.

¿Para qué industrias y aplicaciones son especialmente pertinentes las soluciones de automatización y digitalización de IOSB y qué las hace destacar?

Nuestro grupo objetivo son principalmente empresas manufactureras, como constructores de maquinaria, fabricantes de componentes o proveedores de software, es decir, los proveedores de fábricas y fabricantes de una amplia variedad de bienes. Un estudio reciente muestra que estos proveedores ya están bastante bien posicionados en términos de digitalización y automatización. Los operadores de fábricas, por ejemplo, las empresas medianas de 20 a 50 empleados, todavía tienen que ponerse al día en términos de digitalización. Sin embargo, se ha demostrado que las soluciones propietarias, es decir, las desarrolladas por la propia empresa y diseñadas específicamente para sus propios productos, no conducen al éxito. Las soluciones de digitalización que ofrecemos son, por tanto, amplias y altamente escalables. Nos basamos en normas abiertas disponibles en el mercado que garantizan la interoperabilidad necesaria entre las distintas aplicaciones y generan mejoras reales.